Al Socio para el apostolado de la Orden le incumbe principalmente:
- ayudar al Maestro de la Orden en todo lo que se refiere al ministerio de la palabra;
- cuidar en toda la Orden de los problemas que surjan acerca de la vida apostólica y la evangelización;
- como tarea especial respecto de las misiones de la Orden, se encarga de tratar sus asuntos con la Santa Sede, de ayudar al Maestro de la Orden en el régimen de las mismas, y de recoger y comunicar las informaciones misioneras.