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121

Establézcanse centros de investigación en los que se conozca especialmente el patrimonio religioso y sociocultural de los pueblos, y sea integrado en la unidad católica lo que con ella sea compatible. Con la colaboración de las diversas Provincias sean promovidos en gran manera estos centros como muy conformes con el apostolado peculiar de la Orden.

Ordenación
In fieri
No
Entró en vigor:
Primera promulgación:

120

La Provincia erigida en tierra de misiones manifieste su espíritu misionero, de tal forma que no solamente haga participantes del mensaje evangélico a sus conciudadanos, sino que también haga esfuerzos por predicarlo a otros pueblos.

Ordenación
In fieri
No
Entró en vigor:
Primera promulgación:

119

  1. Nuestros misioneros, dentro de lo posible, instauren la vida regular, y procuren vivir plenamente en comunidad.
  2. Para conseguir esto, eríjase cuanto antes un convento en el que se refleje la vida dominicana según las exigencias, la naturaleza y el carácter peculiar del pueblo evangelizado, para que aparezca realmente como nativa y no extraña en su patria. Incorpórense también las tradiciones ascéticas y contemplativas, que estén en armonía con la vida dominicana, cuyas semillas han sido infundidas algunas veces por Dios en las antiguas culturas con anterioridad al Evangelio.
  3. Lo más pronto que se pueda, promuévanse las vocaciones dominicanas, a fin de que sea estable la implantación de la Orden y pueda erigirse y tener vida una Provincia autóctona.
Ordenación
In fieri
No
Entró en vigor:
Primera promulgación:

118

Puesto que la vida religiosa es signo preclaro del reino celestial y, a través de la íntima consagración hecha a Dios dentro de la Iglesia, pone también de manifiesto de manera clara y significa la naturaleza íntima de la vocación cristiana, ya desde los comienzos del establecimiento de la Iglesia, nuestros misioneros promuevan con toda diligencia la vida religiosa bajo formas nativas.

Ordenación
In fieri
No
Entró en vigor:
Primera promulgación:

117

Tengan presente nuestros misioneros que el fin de las misiones se ordena a formar comunidades de fieles, para que cuanto antes puedan por sí mismas atender a sus necesidades propias. Por tanto, procuren que la Iglesia particular, provista de suficientes sacerdotes, religiosos y laicos locales, sea enriquecida con aquellos servicios e instituciones que son necesarios para llevar y dilatar la vida cristiana regida por su propio obispo.

Ordenación
In fieri
No
Entró en vigor:
Primera promulgación:

114

  1. Para el cumplimiento más eficaz y cabal de las tareas misionales, se ha de fomentar la colaboración de los frailes entre las Provincias que trabajan en la misma región.
  2. Haya también colaboración de todas las Provincias en toda la actividad misionera de la Orden, de tal forma que los Priores Provinciales ofrezcan de buen grado frailes aptos para llevar adelante esa empresa común.
  3. Para resolver los asuntos de misiones el Maestro de la Orden es ayudado por el socio para el apostolado en la Orden. 
Ordenación
In fieri
No
Entró en vigor:
Primera promulgación:

113

  1. El cuidado de las misiones corresponde a toda la Orden y, por lo mismo, cada uno de los frailes ayude, en la manera que pueda, a las misiones. Incumbe al Maestro de la Orden prestar su ayuda en colaboración con las Provincias interesadas, de modo que frailes de una o varias Provincias sean enviados al servicio de las iglesias locales.
  2. Nuestra actividad misional se rige:
    1. por el derecho común y por los decretos especiales de la Santa Sede;
    2. por las constituciones, y por los estatutos particulares elaborados por las Provincias.
Ordenación
In fieri
No
Entró en vigor:
Primera promulgación:

112

Los superiores deben preocuparse más de erigir conventos en misiones que de mantener territorios, a fin de que los frailes puedan dedicarse con máxima libertad al ministerio de la palabra, según el carisma propio de la Orden.

Ordenación
In fieri
No
Entró en vigor:
Primera promulgación:

111

Muéstrense los frailes siempre dispuestos a coloquios y a todas las oportunidades de verdadero diálogo, sea iniciándolos sea continuándolos, con los miembros de otras religiones y con los no creyentes. Tengan presente, sin embargo, que es absolutamente necesaria una preparación especial sobre los problemas que de ello se originan.

Ordenación
In fieri
No
Entró en vigor:
Primera promulgación:

110

Dentro de los cambios que afectan a la misma vida cristiana, sobre todo por el progreso de las ciencias, de las artes o de la cultura, esfuércense sumamente los frailes en discernir los valores que indiquen un camino para un sentido más vivo de Dios, y trabajar por resolver los problemas planteados a los hombres por esta misma evolución, a fin de que la predicación del Evangelio suscite una adhesión a la fe más pura y madura.

Ordenación
In fieri
No
Entró en vigor:
Primera promulgación: